Introducción a No temamos al Nuevo Orden
Se dice que el nuevo orden mundial consiste en una confabulación de personajes oscuros que arrasarán contra la humanidad. La transición es global hacia relaciones cada vez más virtuales, cuyo potencial de satisfacción no tiene por qué ser negativo.
La vida social presencial enfatiza el consumo de bebidas alcohólicas, por no mencionar otros vicios. Los temas que interesan a quienes generamos boletines no suelen ser conversaciones favoritas en el Viejo Orden. Despotricamos de la soledad y la adicción a redes, cuando apenas es menester recurrir a modificaciones estratégicas de nuestros hábitos de consumo en contenidos cibernéticos.
Existe un nicho estudiantil que desea permanecer inscrito en educación en línea. Las ofertas para retomar actividades presenciales a menudo no son convincentes. Nos hemos adaptado a cierta separación física, a cambio de relaciones virtuales globalizadas cada vez más completas. Los traductores en línea borraron la necesidad de permanecer prisionero en los prejuicios específicos de cultura hispana, lusa, francófona, anglófona. En días recientes hemos aprendido a diferenciar traductores de ucraniano a ruso.
Ningún país es indispensable. El comercio de países sancionados migra hacia nuevos mercados, y las alternativas de pago se expanden diariamente. Los modelos de negocio cambian velozmente. Disponemos de libertad para ocupar nuestro tiempo y energía en lo que nos apasione, basta con mitigar la adicción a distraernos compulsivamente. Este cambio al Nuevo Orden Mundial apasiona, se pretende con estos ensayos semanales generar cierto matiz positivo que contrarreste desasosiegos y resistencias.
Rubén Rivero Capriles
Caracas, Venezuela
Fotografía Harold M. Cooper @haroldm.cooper , 40 Grados Bajo el Sol
Caracas vista desde San Agustín del Sur