Primarias con diálogo y sin sanciones

Promotores de primarias pretenden imponer al elector una camisa de fuerza. No existe obligación de sufragar por ningún candidato presidencial que gane primarias, si su oferta programática es eludir el diálogo internacional, promoviendo sanciones contra Venezuela.

Radicales se expresan de forma peyorativa contra moderados, instigando divisiones, odio y resentimiento entre opositores. Toxicidad del extremismo es tan exacerbada, que ahora existen puntos de encuentro entre oficialismo y oposición cohabitante que se impondrán en la agenda electoral.

De ganar primarias opositoras alguna candidatura extremista, de ésas que suelen humillar a sectores moderados y responden a intereses financistas extranjeros, será factible que electores afectados endosen su voto presidencial a candidatos fuera de las primarias, o incluso del oficialismo.

Sanciones coercitivas unilaterales, aplicadas por países que se adjudican vocería en comunidad internacional, durante años destruyeron porcentajes significativos de la economía venezolana. Sabotear esfuerzos para eliminar sanciones, mediante boicot al diálogo, no es digno de estadistas.

Primarias están diseñadas para que cada sector lance propuestas constructivas, y simultáneamente se propongan estrategias para destruir las alternativas que ofrezca la competencia. Una vez conozcamos al vencedor de primarias, se podrá decidir si merece nuestro voto en elecciones presidenciales.

Rubén Rivero Capriles

Caracas, Venezuela

Fotografía José Gregorio Hernández 

Atardecer en Cuernavaca, 40 Grados Bajo el Sol